Desde la Asociación Colombiana de Universidades, Ascun, gremio que integra el Sistema mixto de educación superior, conformado por universidades oficiales y no oficiales, manifestamos la disposición para acompañar la ejecución del Plan Nacional de Desarrollo 2022-2026 «Colombia Potencia mundial de la vida»; en particular, lo concerniente con el componente de educación superior.
En este sentido, expresamos la necesidad de ampliar y fortalecer el diálogo con el Ministerio de Educación Nacional; alrededor, de una agenda común para avanzar en las metas del sector, como son: 1. Ampliación de cobertura con un modelo de regionalización de la universidad pública, que integre la privada, con enfoque territorial; es decir, las regiones donde el indicador de cobertura está por debajo de la media nacional, lo cual exige un plan de infraestructura física y tecnológica que modernice y amplíe los campus universitarios. 2. Es necesario que las sedes regionales oferten programas académicos pertinentes para el desarrollo del país, que cuenten con metodologías y pedagogías de virtualización hasta donde sea posible con la conectividad existente. Lo anterior, requiere, por parte del Ministerio de Educación Nacional, repensar la estructura normativa que regula el actual Sistema de Aseguramiento de la Calidad, permitiendo compartir registros calificados entre las universidades; por ello, la ampliación de cobertura requiere reformas y recursos financieros. 3. Es urgente la reforma de los artículos 86 y 87 de la Ley 30 de 1992, que permita un nuevo modelo de sostenibilidad financiera de las instituciones de educación superior públicas. Igualmente, es necesario continuar una discusión amplia entre los actores del sistema de educación superior encaminado a una reforma integral de la Ley 30 de 1992. La planeación y puesta en marcha de una reforma tan importante, requiere integración de los actores del sector, considerándolos a todos como parte constitutiva del mismo, en donde primen reglas claras, para que el proceso alcance su cometido. 4. Coincidimos con el PND cuando propone una reconceptualización del Sistema de Aseguramiento de la Calidad, racionalizando procesos y trámites enfocados a una gestión del fomento de la calidad, para el mejoramiento continuo de los procesos misionales en la educación superior; dicho de otro modo, una política de aseguramiento de la calidad con énfasis en la gestión del fomento y, no solo, en la inspección y vigilancia que ha sido el modelo dominante, con el cual, se ha ejercido presión sobre rectores e instituciones de educación superior. 5. Desde el sistema mixto de educación superior, reiteramos el llamado al diálogo, a convertir nuestros campus universitarios en ágoras públicas donde se delibere con argumentos sobre aspectos institucionales y el proyecto de nación que nos debe convocar. La violencia es la negación no solo de la racionalidad, sino de la esencia misma de la universidad. Este es el camino que debemos seguir insistiendo y recorriendo, que todos convenimos arropar y defender. Este es el mejor mensaje de rechazo a los violentos que se mimetizan en la universidad para desnaturalizarla y negar su esencia y naturaleza. 6. Ampliar y profundizar el diálogo con el Ministerio de Ciencias, con el fin de retomar y jalonar las apuestas científicas del país.
Desde el Sistema mixto de educación superior, reiteramos nuestra disposición y acompañamiento en la materialización del Plan Nacional de Desarrollo; nuestro propósito y compromiso es la transformación de Colombia desde la educación superior. Desde la Asociación Colombiana de Universidades, Ascun, gremio que integra el Sistema mixto de educación superior, conformado por universidades oficiales y no oficiales, manifestamos la disposición para acompañar la ejecución del Plan Nacional de Desarrollo 2022-2026 «Colombia Potencia mundial de la vida»; en particular, lo concerniente con el componente de educación superior.
En este sentido, expresamos la necesidad de ampliar y fortalecer el diálogo con el Ministerio de Educación Nacional; alrededor, de una agenda común para avanzar en las metas del sector, como son: 1. Ampliación de cobertura con un modelo de regionalización de la universidad pública, que integre la privada, con enfoque territorial; es decir, las regiones donde el indicador de cobertura está por debajo de la media nacional, lo cual exige un plan de infraestructura física y tecnológica que modernice y amplíe los campus universitarios. 2. Es necesario que las sedes regionales oferten programas académicos pertinentes para el desarrollo del país, que cuenten con metodologías y pedagogías de virtualización hasta donde sea posible con la conectividad existente. Lo anterior, requiere, por parte del Ministerio de Educación Nacional, repensar la estructura normativa que regula el actual Sistema de Aseguramiento de la Calidad, permitiendo compartir registros calificados entre las universidades; por ello, la ampliación de cobertura requiere reformas y recursos financieros. 3. Es urgente la reforma de los artículos 86 y 87 de la Ley 30 de 1992, que permita un nuevo modelo de sostenibilidad financiera de las instituciones de educación superior públicas. Igualmente, es necesario continuar una discusión amplia entre los actores del sistema de educación superior encaminado a una reforma integral de la Ley 30 de 1992. La planeación y puesta en marcha de una reforma tan importante, requiere integración de los actores del sector, considerándolos a todos como parte constitutiva del mismo, en donde primen reglas claras, para que el proceso alcance su cometido. 4. Coincidimos con el PND cuando propone una reconceptualización del Sistema de Aseguramiento de la Calidad, racionalizando procesos y trámites enfocados a una gestión del fomento de la calidad, para el mejoramiento continuo de los procesos misionales en la educación superior; dicho de otro modo, una política de aseguramiento de la calidad con énfasis en la gestión del fomento y, no solo, en la inspección y vigilancia que ha sido el modelo dominante, con el cual, se ha ejercido presión sobre rectores e instituciones de educación superior. 5. Desde el sistema mixto de educación superior, reiteramos el llamado al diálogo, a convertir nuestros campus universitarios en ágoras públicas donde se delibere con argumentos sobre aspectos institucionales y el proyecto de nación que nos debe convocar. La violencia es la negación no solo de la racionalidad, sino de la esencia misma de la universidad. Este es el camino que debemos seguir insistiendo y recorriendo, que todos convenimos arropar y defender. Este es el mejor mensaje de rechazo a los violentos que se mimetizan en la universidad para desnaturalizarla y negar su esencia y naturaleza. 6. Ampliar y profundizar el diálogo con el Ministerio de Ciencias, con el fin de retomar y jalonar las apuestas científicas del país.
Desde el Sistema mixto de educación superior, reiteramos nuestra disposición y acompañamiento en la materialización del Plan Nacional de Desarrollo; nuestro propósito y compromiso es la transformación de Colombia desde la educación superior.