Información para los lectores de Revista EXPECTATIVA 43 Años.
Montería, 24 de agosto de 2024. Desde la Secretaría de Salud de Montería se hace un llamado a la comunidad para tomar las medidas de precaución frente al dengue y a estar pendientes de la posible presentación de casos. Así mismo, la entidad continúa con un seguimiento a la situación y a la atención de los pacientes, en una labor que integra el trabajo de las distintas entidades, en busca del bienestar general de los monterianos.
Cabe destacar que Montería es considerado endémico para la transmisión del dengue. Hasta la semana epidemiológica 33 (17 de agosto de 2024), se reportaron 970 casos de dengue, lo cual representa un aumento del 5% con relación al mismo periodo del año 2023. Según el Instituto Nacional de Salud, el municipio se encuentra en situacion de Brote tipo 2 y catalogado como municipio de muy alta transmisibilidad.
Dentro de los factores que facilitan la transmisión de esta enfermedad se encuentran: la distribución del mosquito Aedes aegypti en las comunidades; la circulación de los cuatro serotipos del virus dengue; las malas prácticas de almacenamiento de agua, que generan criaderos potenciales del mosquito, y las condiciones climáticas que actualmente enfrenta el país. Por eso, desde la Alcaldía de Montería se hace un llamado permanente al autocuidado y a mitigar la proliferación de los mosquitos.
Todos esos aspectos fueron tratados en el Comité de Vigilancia Epidemiológica, realizado en el auditorio de Centro Verde. Esta es una de las actividades que se coordinan desde la cartera de Salud, para vigilar la situación epidemiológica y realizar el seguimiento a la adherencia a las guías para manejo y atención integral de los pacientes con dengue, por parte de las diferentes IPS. Igualmente, se realizan acompañamientos técnicos y auditorías.
La Secretaría de Salud de Montería propende diariamente por la mitigación de los casos, teniendo en cuenta que la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó: “Tras un ligero descenso de los casos entre los años 2020 y 2022, debido a la pandemia de COVID-19 y a una menor tasa de notificación, desde 2023 se ha observado un repunte en todo el mundo, caracterizado por un aumento considerable del número y la escala de los casos y por la simultaneidad de múltiples brotes, que se extienden a regiones anteriormente no afectadas por el dengue. La transmisión del dengue es cíclica y cabe esperar grandes brotes cada 3 o 4 años».
Hay que estar alerta
Ante síntomas como fiebre, dolores musculares o de articulaciones, dolor detrás de los ojos, dolor intenso de cabeza y/o erupción cutánea lo mejor es no automedicarse. Se debe acudir a los servicios de salud para ser atendido de forma oportuna; así como atender las orientaciones de cuidado en casa y asistir a las citas de seguimiento programadas por el profesional tratante.
Aunque no hay ningún tratamiento específico para el dengue, el diagnóstico precoz, la detección de los signos de alarma de dengue grave y la atención clínica adecuada y oportuna son fundamentales para reducir el riesgo de complicaciones y muerte.
Sobre el dengue
Esta es una enfermedad ocasionada por el virus del Dengue, que tiene 4 serotipos: DENV-1, DENV-2, DENV-3, DENV-4, para Montería, circulan simultáneamente los serotipos DENV- 1, DENV-2 Y DENV-4, con mayor proporción del DENV-2 considerado el más infectante y que ocasiona mayores complicaciones, éste se transmite al ser humano por la picadura de mosquitos infectados, mayormente pero no exclusivo de las zonas urbanas. El principal vector de la enfermedad es el mosquito Aedes aegypti y, en menor medida, Aedes albopictus, reportado recientemente en el municipio.
El alto número de precipitaciones favorece la proliferación de mosquitos. Sin embargo, todos estos insectos no transmiten dengue, solo el Aedes aegypti; los demás, por su reproducción tan rápida son causantes de molestias sanitarias. Tan pronto las lluvias disminuyan la “ola de mosquitos” también lo hará.
Debemos prevenir
Hay que esforzarse por reducir y eliminar los criaderos del mosquito dentro de las viviendas y en sus alrededores. Insistimos en la recomendación de adoptar en casa o en los sitios de estudio y de trabajo las siguientes medidas:
- Lavar y cepillar albercas de forma periódica (cada 7 días).
- Cambiar diariamente el agua de floreros y bebederos de animales.
- Reemplazar el agua por arena en floreros.
- Eliminar basuras, latas, botellas, llantas y objetos en desuso que almacenen agua.
- Limpiar los jardines y lotes baldíos.
- Tapar recipientes de almacenamiento de agua.
- Dar vuelta a recipientes de uso doméstico.
- Secar áreas de las viviendas que puedan almacenar agua estancada.