Por: Erasmo Elías Zuleta Bechara.
Parafraseando a Aristóteles Onassis, los países y las entidades territoriales no tienen enemigos, solamente competidores.
Aunque en los últimos días revistas tan influyentes como The Economist hablan de un nuevo orden económico mundial donde la globalización parece estar en retirada, lo cierto es que a nivel regional las empresas locales e internaciones continúan tomando decisiones de expansión en los lugares donde más les es favorable invertir. Es por esto que, como gobernantes departamentales, procuramos porque en nuestros territorios tengamos las condiciones más favorables para atraer inversionistas. Pero también es fundamental que desde el gobierno nacional exista el mismo propósito y convicción. La competitividad es un trabajo a varias manos.
Para el caso del departamento de Córdoba, vamos en el camino correcto. A pesar que para el año 2023 descendimos a la posición número 22 en el Índice Departamental de Competitividad elaborado por el Consejo Privado de Competitividad y la Universidad del Rosario, principalmente por los pilares de instituciones, sofisticación y diversificación, infraestructura, educación básica y media y entorno para hacer negocios, espero como Gobernador del Departamento de Córdoba, que con el Plan de Desarrollo Departamental 2024 – 2027 muchas de estas debilidades se conviertan en fortalezas al culminar mi mandato.
El Plan de Desarrollo Departamental 2024 – 2027, “Córdoba lo tiene todo para estar a otro nivel”, consta de 5 ejes: Córdoba más equitativa e incluyente, Córdoba primera en competitividad, Córdoba más sostenible, Córdoba segura, en paz y con justicia y el quinto eje corresponde a fortalecimiento institucional. Cada uno de estos ejes cuenta con un conjunto de componentes y proyectos estratégicos a implementar con el objetivo de convertir al departamento en un territorio de desarrollo y progreso.
Pero todos estos esfuerzos territoriales requieren también del esfuerzo coordinado del Gobierno Nacional y su colaboración con los territorios. En este frente hay mucho por hacer. De acuerdo con el Ranking Mundial de Competitividad 2023 del International Institute for Management Development, la competitividad de Colombia ha descendido de la posición 52 en el año 2019 a la posición 58 en el 2023, destacándose una fuerte caída en los pilares de eficiencia gubernamental y eficiencia en los negocios.
Muy especialmente en los frentes tributarios, de seguridad y de confianza inversionista se demandan acciones concretas. Desde el frente tributario, por ejemplo, de conformidad con el Índice Internacional de Competitividad Fiscal 2023 realizado por Tax Foundation, Colombia ocupa la última posición de competitividad tributaria entre 38 economías analizadas. En el frente de seguridad, la Federación Colombiana de Transportadores de Carga por Carretera, COLFECAR, asegura que en lo que va corrido del año se han generado pérdidas para el sector por COP$ 1.1. billones por bloqueos, donde desafortunadamente en el departamento de Córdoba es donde más bloqueos se han presentado después del Atlántico y La Guajira. Y los anteriores dos componentes mezclados con algunos anuncios ministeriales no ha generado tranquilidad en los inversionistas, ni locales ni internacionales.
De parte de las entidades territoriales y del Departamento de Córdoba, estamos haciendo lo que nos corresponde para ser más competitivos, pero hay unos factores del orden nacional donde solicito el apoyo gubernamental para salir adelante. La competitividad se logra, a varias manos.